Cuando el peso cae por si mismo

Un volver; un reencuentro con un lugar conocido, sentirme comodo en un lugar ya no frecuentado desde hace mas de tres años: recuerdos, he dicho "la vida no es mas que la suma de nuestras decisiones" cuanto pudo el orgullo pesarnos cuando nos laceramos deliciosa y delicadamente hace ya tanto tiempo? cual es el precio que debo pagar por haber huido antes de ser abandonado - y vaya que se ha vuelto mi modus operandi, ja!-. Un climbeo desconocido que me hostigará el pensamiento por el resto de mi vida. Que son los recuerdos en la mente si no mas que alguna especie de diccionario de; nombres, lugares, aromas, experiencias...

Cuanto pudo el Orgullo manipular nuestra situacion?,no lo sé, sin duda por ahora no mas que un placentero mal sabor de boca.. mjm!...

1 comentario

[$ - 12 de junio de 2006 - 05:21]

El orgullo no te hace abandonar, si no la fugaz satisfaccion de ir y venir, ese cambiante "modus operandi" se traduce en una lenta busqueda de personalidad que pierde el rumbo cada vez que vuelves, otra vez, a dejar de sentirte satisfecho, inmadura inconciencia manipulada.

Los que te conocemos siempre vemos verde, pero nunca la misma tonalidad